Major Groups response to Colombia
(Agradecimientos)
Sr. Moderador, nos alegra inmensamente la posibilidad de contribuir a este panel en representación de los Major Groups y como miembros de Juntos 2030.
El informe que presenta el gobierno de Colombia, y que lo ratifica como uno de los primeros implementadores de la Agenda 2030, es una oportunidad para pensar en conjunto el valor de las escalas nacional y subnacional en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Colombia es un país que enfrenta una situación crucial por el proceso de paz que hoy atraviesa.
La necesidad que - tal como refleja el informe - tendrá el país de trabajar sobre la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la agenda de paz al mismo tiempo, hablan de la existencia de un marco particular, y quizás único en el mundo.
Las tensiones que se puede esperar surjan del proceso de paz, tras décadas de un conflicto interno que ha generado brechas de inequidad y desconfianza en la sociedad, son un desafío más que Colombia debe enfrentar a la hora de avanzar hacia el logro de los ODS.
Si bien el informe muestra la existencia de alineamiento entre ambas agendas, también es cierto que se requerirá de una planificación clara de políticas de Estado para poder superar esas tensiones, con mecanismos de monitoreo y rendición de cuentas claros, transparentes y participativos.
De qué manera el gobierno de Colombia se prepara para enfrentar esas tensiones es una pregunta que no encuentra clara respuesta en el informe.
Por otra parte, el documento presentado por Colombia subraya los avances institucionales ya producidos en el ámbito gubernamental colombiano hacia la implementación de los ODS a nivel nacional, destacando incluso lo local como un espacio que debe ser privilegiado.
La creación de una Comisión Interministerial de Alto Nivel para la implementación de la Agenda 2030 es un paso que saludamos con respeto.
Sin embargo, solo a través de la inclusión y la participación de todos los actores del Desarrollo podrá generarse la necesaria apropiación de la Agenda, y no es claro aún de qué manera éstos participarán en el proceso de definición de políticas, implementación y seguimiento de la Agenda 2030 ni qué estrategias se establecen para asegurarse que los representantes de cada sector estén debidamente legitimados y respaldados.
La pregunta es entonces: ¿Cómo superar las prácticas tradicionales y hacer que todos los actores sean verdaderos protagonistas de los procesos en marcha?
La respuesta no resulta claramente del texto del informe del gobierno de Colombia y quisiéramos conocer su visión al respecto, ya que no se trata solo de “abrir la participación” sino de trabajar juntos para asegurar que esta sea legítima y debidamente tenida en cuenta en la toma de decisiones.
Para la sociedad civil se trata de un asunto fundamental, ya que sus contribuciones a la planeación, implementación, monitoreo y evaluación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible solo pueden ocurrir si los gobiernos lideran la creación de ambientes habilitantes para ello.
Tanto la Paz como el Desarrollo necesitan que ese potencial se active y que las alianzas multisectoriales sean una realidad.
Damas y caballeros, la oportunidad está abierta y se requiere de la voluntad política y del valor que implica aprovecharla.
Muchas Gracias.
Sr. Moderador, nos alegra inmensamente la posibilidad de contribuir a este panel en representación de los Major Groups y como miembros de Juntos 2030.
El informe que presenta el gobierno de Colombia, y que lo ratifica como uno de los primeros implementadores de la Agenda 2030, es una oportunidad para pensar en conjunto el valor de las escalas nacional y subnacional en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Colombia es un país que enfrenta una situación crucial por el proceso de paz que hoy atraviesa.
La necesidad que - tal como refleja el informe - tendrá el país de trabajar sobre la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la agenda de paz al mismo tiempo, hablan de la existencia de un marco particular, y quizás único en el mundo.
Las tensiones que se puede esperar surjan del proceso de paz, tras décadas de un conflicto interno que ha generado brechas de inequidad y desconfianza en la sociedad, son un desafío más que Colombia debe enfrentar a la hora de avanzar hacia el logro de los ODS.
Si bien el informe muestra la existencia de alineamiento entre ambas agendas, también es cierto que se requerirá de una planificación clara de políticas de Estado para poder superar esas tensiones, con mecanismos de monitoreo y rendición de cuentas claros, transparentes y participativos.
De qué manera el gobierno de Colombia se prepara para enfrentar esas tensiones es una pregunta que no encuentra clara respuesta en el informe.
Por otra parte, el documento presentado por Colombia subraya los avances institucionales ya producidos en el ámbito gubernamental colombiano hacia la implementación de los ODS a nivel nacional, destacando incluso lo local como un espacio que debe ser privilegiado.
La creación de una Comisión Interministerial de Alto Nivel para la implementación de la Agenda 2030 es un paso que saludamos con respeto.
Sin embargo, solo a través de la inclusión y la participación de todos los actores del Desarrollo podrá generarse la necesaria apropiación de la Agenda, y no es claro aún de qué manera éstos participarán en el proceso de definición de políticas, implementación y seguimiento de la Agenda 2030 ni qué estrategias se establecen para asegurarse que los representantes de cada sector estén debidamente legitimados y respaldados.
La pregunta es entonces: ¿Cómo superar las prácticas tradicionales y hacer que todos los actores sean verdaderos protagonistas de los procesos en marcha?
La respuesta no resulta claramente del texto del informe del gobierno de Colombia y quisiéramos conocer su visión al respecto, ya que no se trata solo de “abrir la participación” sino de trabajar juntos para asegurar que esta sea legítima y debidamente tenida en cuenta en la toma de decisiones.
Para la sociedad civil se trata de un asunto fundamental, ya que sus contribuciones a la planeación, implementación, monitoreo y evaluación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible solo pueden ocurrir si los gobiernos lideran la creación de ambientes habilitantes para ello.
Tanto la Paz como el Desarrollo necesitan que ese potencial se active y que las alianzas multisectoriales sean una realidad.
Damas y caballeros, la oportunidad está abierta y se requiere de la voluntad política y del valor que implica aprovecharla.
Muchas Gracias.